Nos despedimos de la Luna, pero…Conquistamos el universo
Hace un par de semanas en Wake-up despedimos el cuento ¿a qué sabe la luna? un cuento que como ya sabéis nos ha dado muy buenos momentos y nos ha hecho aprender muchos conceptos nuevos y compartir muchas experiencias que nos hacen crecer como compañeros.
Esta semana los mayores de la escuela han podido probar como sabe la luna, ellos con sus manitas ¡la modelaron, la hornearon y la probaron! Pues trabajaron con masa de pan, se lo pasaron en grande, a esa emoción de hacer una luna le sumamos que lo hicieron en nuestro patio al aire libre disfrutando de los días tan buenos que tenemos en nuestra ciudad.
Los más pequeños han trabajado los colores de la unidad con objetos cotidianos, ya contamos en otro post anterior los beneficios de trabajar con estos objetos pues favorecen el juego simbólico, nos hemos disfrazado de los animales del cuento, y como el tiempo acompañó al final de la semana salimos a ver nuestro huerto que tiene muchas fresitas y tomates casi listos para ser recolectados.
Pero la actividad más importante y de la que no he querido hablar hasta ahora (pues era un sorpresa), es que nuestros niños/as han realizado su propia versión del cuento ¿a qué sabe la luna?, lo han hecho con sus manitas, sus pies y mucha imaginación de nuestras teachers, ha sido una actividad muy divertida donde hemos trabajado con texturas, pinturas, con distintas partes del cuerpo, la motricidad tanto fina como gruesa, la coordinación óculo-manual, la atención, la concentración, la imaginación, la expresión tanto artística y verbal de todos nuestros alumnos/as.
La semana pasada se empezó una nueva unidad cargada de nuevas experiencias y sorpresas ¿nos acompañáis a conquistar el universo? Nuestr@s alumnos/as se han adentrado en “El universo”, un mundo lleno de sensaciones y aprendizajes nuevos que hace que los tanto los pequeños como los más mayores dejen volar su imaginación.
La semana empezó con la presentación del cuento en el aula mágica, es un cuento para leer a oscuras, perfecto para trabajar con la luz negra de esta aula.
A lo largo de la semana hemos presentado a nuestro amigo Horacio el astronauta que nos invita a recorrer el universo y nos cuenta cosas muy curiosas sobre los planetas, estrellas y galaxias.
Quizás penséis que es un cuento muy difícil de trabajar con niños/as tan pequeños pero os aseguro que os asombraría ver las caras de curiosidad y las ganas de aprender de nuestros alumnos/as, además todas las actividades están diseñadas acorde a la edad con la que estamos trabajando, así que ellos disfrutan y aprenden, a la vez que nosotras aprendemos y nos sorprendemos con ellos.
Salir del aula dirigirnos al aula mágica para poder ver las “estrellas” fue una actividad única que todos disfrutaron muchísimo, introducirnos en la piscina de bolas y sentir como el cuerpo se deja llevar por el movimiento de estas haciéndoles sentir que están flotando como en “el espacio”
Además hemos trabajado los colores a través de los planetas y su forma esférica con pelotas de diferentes tamaños.
Para terminar la semana queríamos convertirnos en nuestro astronauta Horacio y nos hicimos nuestros propios cascos y con él ya que estamos preparados seguiremos explorando el universo.