Periodo de adaptación en Wake-Up

 En Sin categoría

Desde Wake-Up queremos informar a las familias sobre el periodo de adaptación en la escuela. Dada la importancia de este momento tanto para los alumnos/as como para las familias, nuestra teacher Miriam nos lo explica en este artículo.

El inicio en la escuela infantil es uno de los momentos más significativos que atraviesan tanto los niños/as durante su infancia como los padres, quienes necesitan considerar dicha decisión durante un tiempo más o menos prolongado. A pesar de que los motivos por los que deciden llevar a sus hijos/as al centro infantil pueden ser diversos, en la mayoría de los casos, la decisión es compleja y puede llegar a agobiar a las familias, que deben enfrentarse a los miedos que surgen ante tal decisión.

Por tanto, se puede afirmar que la entrada a escuela es un cambio importante para toda la familia. Especialmente para la vida de los niños y niñas, pues salen de un entorno conocido y seguro y se separan de forma continuada de su familia. Esto les puede provocar sentimientos de miedo, ansiedad e inseguridad. Por ello, desde Wake-Up se propone un periodo de adaptación ajustado a cada caso particular.

El periodo de adaptación se puede considerar como el proceso por el cual el/la niño/a va creando y preparando, desde el punto de vista de los sentimientos, la aceptación e inclusión en un medio nuevo, que le proporcionará un status personal y social nuevo. Para alcanzar este objetivo de aceptación e inclusión de manera exitosa, cada niño/a necesita de un tiempo concreto. Puesto que todos los niños no son iguales, debemos tener en cuenta que la adaptación de unos y otros también será distinta. Por tanto, se debe perseguir una enseñanza individualizada que les permita adaptarse a su propio ritmo, proporcionándole a cada uno las ayudas que necesite en función de sus características.

Durante este periodo, los niños dispondrán del tiempo que necesiten para aceptar la separación de sus familias, acomodarse a la rutina escolar y descubrir a sus compañeros/as.
De manera general en Wake-Up, este periodo comprenderá 15 días durante los cuales los niños acudirán al centro un menor número de horas. Concretamente, la primera semana asistirán un máximo de 2 horas al día, de 10h a 12h. A partir de la segunda semana, se establecerá el número de horas en función a lo estimado por la tutora y las familias, para cada caso.

 

Instrumentos y recursos para el proceso de adaptación

Además de llevar a cabo el periodo de adaptación anteriormente mencionado, se propone la utilización de una serie de instrumentos y recursos para facilitar el proceso de adaptación escolar infantil. Estos se pueden llevar a tanto a nivel del centro como a nivel familiar:

A nivel de centro

  • Visitas programadas. Resultan una herramienta fundamental, dado que sirven tanto para reducir el nivel de desconfianza de los padres como para aproximar al alumnado al entorno escolar. Estas suelen tener lugar durante jornadas de puertas abiertas previas a la matriculación en el centro. Durante las mismas, los padres pueden observar las instalaciones, conocer los servicios del centro y tener un primer contacto con el profesorado y el equipo directivo del centro.
  • Cuestionario a las familias. A través de él, la familia aporta datos relativos al ambiente familiar, hábitos de su hijo/a, historia clínica del/la pequeño/a y sus gustos y preferencias que serán de gran utilidad para que profesorado y el equipo directivo del centro tenga un conocimiento previo de sus alumnos/as.
  • Participación en eventos previos a la escolarización. Durante la realización de actividades extraescolares que tengan lugar antes de la escolarización, se invita a las familias a que participe junto a sus hijo/as.
  • Contactos telefónicos durante todo el proceso de adaptación. Estos contactos pueden ser iniciados tanto por los padres para reducir su ansiedad como por los tutores para demandar cierta información y/o aclarar dudas.
  • Circulares informativas con recomendaciones y pautas para las familias.
  • Entrevista personal con las familias en diferentes momentos del periodo de adaptación: previa a la escolarización, tras el primer mes y posteriores entrevistas de seguimiento.
  • Registros de observación individualizados sobre aspectos de la adaptación durante los primeros días de la escolarización a cumplimentar por los tutores/as.

A nivel familiar

Es fundamentar la actitud de la familia ante la incorporación de sus hijos/as en la escuela, pues esta tendrá una repercusión en el transcurso del proceso de adaptación. Por ello, se les ofrecerá a las familias una serie de recomendaciones para que faciliten el periodo de adaptación de los/as niños/as:

  • Adaptación horaria. Es importante ayudarles a que se adapten a los nuevos horarios. Por ejemplo, permitiéndoles que duerman más de lo habitual si es lo que necesitan o adelantar la hora del sueño para que al día siguiente estén más descansados.
  • Objetos de apego. Permitir que lleve a la escuela su juguete preferido, o algo que le sea familiar y le mantenga unido con su hogar, puesto que refuerza su seguridad.
  • Despedidas rápidas. Evitar prolongar demasiado las despedidas: es necesario transmitirles seguridad.
  • Motivación y ánimo. Dedicarles tiempo a la salida de la escuela, animándoles a compartir las experiencias y demostrando alegría y entusiasmo.
  • Entradas y salidas. Es preferible que sea el padre o la madre quienes le lleven y les recoja. Con esta rutina se les proporcionará seguridad y se acostumbrarán antes al cambio.
  • Contacto directo. Mantener un contacto directo con el/la tutor/a sobre las dudas, inquietudes y/o cualquier cambio observado. Los padres y madres son las personas que mejor conocen a su hijo/a y el nexo de unión entre las necesidades del pequeño y sus nuevos cuidadores/as. Proporcionando cualquier información les ayudarán en su adaptación.
  • Ambiente relajado en el hogar y, especialmente, los momentos antes de acudir a la escuela infantil.