Estimadas familias Wake Up, a continuación os presentamos el siguiente artículo elaborado por nuestra educadora y psicóloga Paula Díaz.

La estimulación sensorial hace referencia a la entrada de información del entorno al sistema nervioso a través de los sentidos para elaborar sensaciones y percepciones. Éstas constituyen los procesos básicos del conocimiento. A medida que el niño va experimentando sensaciones, va aprendiendo sucesivamente a organizarlas en su cerebro y descubriendo lo que significan. Cada vez que el cerebro experimenta una sensación, genera una respuesta adaptativa. Por ejemplo, cuando un niño monta por primera vez en bicicleta las sensaciones del movimiento de su cuerpo cayéndose genera una respuesta adaptativa (acomodar el peso de su cuerpo para mantener el equilibrio) que le ayudará a aprender a montar en bicicleta. Lo mismo ocurre con los bebés. Siempre que agitemos un sonajero delante de un bebé y éste intente alcanzarlo, el intento de alcanzarlo genera en sí una respuesta adaptativa.

Vivimos en un mundo de sensaciones. Cuando escuchamos un ruido, nos giramos para ver qué ha pasado; si nos quedamos sin luz vamos al cajón a buscar la linterna palpando lo que hay dentro para encontrarla; esperamos a tomarnos el café porque está demasiado caliente y podríamos quemarnos, etc. Por ello, es muy importante estimular los sentidos desde pequeños ya que viendo, escuchando, oliendo, tocando y explorando el entorno mediante el movimiento el niño va asimilando experiencias y descubriendo objetos que les ayudará a su aprendizaje posterior.